Varios diarios han destacado el video en que una joven realiza un duro discurso contra el congreso en un hotel de lujo organizado por la Internacional Socialista.
En dicho video, podemos ver a la española Beatriz Talegón echando en cara que reuniones de la Internacional Socialista se celebren «en hoteles de cinco estrellas» y los delegados lleguen «en coches de lujo» (ver video en Youtube, extracto de su discurso, duración 3 minutos 52 segundos).
No estamos ante una anécdota o un caso aislado. Ni mucho menos.
Según advertía Rob Davidson, autor del informe anual de tendencias de la feria EIBTM 2013, el turismo de congresos se ve cada vez más sometido al escrutinio público.
Por ejemplo, en España los congresos y convenciones organizados por el sector farmacéutico ya no pueden incluir aspectos lúdicos ni hacer uso de hoteles de golf y/o temáticos, de acuerdo con el código de autoregulación de la asociación Farmaindustria.
También según recoge dicha normativa, debe suprimirse cualquier aspecto lúdico y/o de entretenimiento asociado al evento. Como consecuencia de estas normativas de austeridad en congresos y convenciones, una empresa farmacéutica puede preferir por ejemplo hoteles de cuatro estrellas en lugar de cinco, aunque la diferencia de precios no fuera muy relevante.
De ahí que varios establecimientos de lujo que trabajan mucho con este tipo de empresas hayan decidido solicitar su reclasificación.
Según añadía Rob Davidson, también los servicios financieros tenderán a organizar menos reuniones y más económicas en 2013 dados los múltiples problemas que afectan a los bancos.
Y es que la imagen de las entidades financieras se ha deteriorado ante la opinión pública desde el inicio de la crisis económica, por lo que las corporaciones bancarias quieren tener un perfil más discreto, poco propenso a organizar grandes viajes para empleados o colaboradores. Ver también Congresos y convenciones: ¿Qué clientes moverán el mercado en 2013?.
Las empresas, y no sólo las del sector financiero, “han vuelto a reconocer el poder de los viajes de incentivos para motivar a sus empleados, pero dichos viajes serán mucho menos ostensosos”, explica Rob Davidson.
“Las compañías están cada vez más nerviosas ante la posibilidad de que puedan quedar expuestas en las redes sociales, dando una imagen de gasto suntuario y de lujo” (justo lo que ha pasado a la Internacional Socialista a través del video de Youtube, que ya lleva más de 70.000 visitas).
Ahora sabemos que -además de farmacéuticas y bancos- otro segmento de la demanda será muy cauteloso y probablemente más austero a partir de ahora en la organización de sus congresos y eventos: los partidos políticos. Y la lista puede seguir ampliándose…